Cualquier aplicación a la que le des permiso para acceder a tus fotografías puede saber fácilmente dónde has estado, cuándo estuviste en cada lugar y, en definitiva, tu rutina diaria.
Felix Krause, un programador de apps para iOS, ha demostrado esta amenaza hacia nuestra privacidad creando una app de prueba que, con solo tener acceso a las fotografías del móvil, puede extraer información muy valiosa… y muy privada.
¿Cómo funciona? Cualquier app con estos permisos solo tendría que analizar los datos EXIF de las fotografías. Estos datos incluyen la apertura del obturador, el ISO usado, o, lo más importante, la ubicación donde se hizo la fotografía.
Si un usuario toma muchas fotografías cada día, una app podría trazar perfectamente su recorrido diario. Y ya sabemos que, en la actualidad, el usuario medio hace fotos en todo momento: cuando se levanta, cuando come, cuando besa a su pareja, cuando realiza un ritual vudú…
Y eso es precisamente lo que hace la app de pruebas de Krause: extrae los datos de las imágenes y te muestra todo lo que sabe sobre ti de forma visual.
Aquí una muestra:
Primero le das permiso para acceder a tus fotos, luego te revela los lugares que sabe que has visitado (“he tardado 0.58 segundos en extraer 11963 localizaciones”, podemos leer en la segunda foto) y finalmente traza una ruta aproximada.
La app en cuestión se llama DetectLocations. Puedes instalarla en iPad y iPhone si tienes iOS 10.3 o superior. Lo único que sirve es para demostrar cuánta información ofrecemos a muchas aplicaciones sin darnos cuenta.
Otro desarrollador, Amal Kakaiya, al ver la app, ha creado otra aplicación de prueba para Android pero ha decidido no publicarla:
Estas dos apps admiten que analizan tu información y te la muestran. Ahora bien. ¿Qué ocurre con WhatsApp, Facebook, Instagram…? ¿Qué hacen todas estas apps con nuestra información? No lo sabemos y esta incógnita es más desconcertante de lo que creía.
Aquí la solución es que tanto Google como Apple tomaran nota de lo que han revelado estos dos desarrolladores y arreglen sus Sistemas Operativos para que ninguna app pueda acceder a los datos EXIF. De esta forma, nos aseguramos que no estamos dando a las compañías detrás de las apps más informaicón privada de la que creemos.
Fuente: Omicrono