Google Drive tiene un oscuro secreto que a su creadora no le ha hecho ninguna gracia descubrir: Drive se ha convertido en el nuevo medio favorito para los piratas online. ¿Cómo es posible que este servicio tan inocuo de Google se haya tornado en un cubil para intercambiar copias ilegales de películas, canciones y otra suerte de material?
La crisis de los sitios de torrents, lo fácil que resulta crear una cuenta de Google y los 15GB de almacenamiento gratuito que ofrece Drive son algunas de las causas que han convertido Google Drive en una herramienta principal del pirateo online.
La gente se “muda” a Google Drive u otros servicios similares, como MEGA o Dropbox, porque las autoridades llevan ya un par de años atacando sitios de torrents como KickassTorrents, Shaaning y compañía. Todavía existen sitios de torrents en activo, pero la dificultad en aumento que conlleva piratear en estos lugares ha provocado que los usuarios busquen alternativas. Además, estos sitios cada vez están más poblados de anuncios que esconder malware y “lindezas” de este estilo.
Por otro lado, todavía existen sitios de torrents privados, lugares más persistentes y difíciles de localizar. No obstante, y como ocurre en la vida real, estos sitios son muy exclusivos y normalmente solo puedes acceder a ellos mediante una invitación. En cambio, es tremendamente fácil hacerse con una cuenta de Google, que automáticamente te da acceso a Drive.
Acceder a Drive no es lo único sencillo de este servicio. Google Drive tiene una de las interfaces de usuario más simples dentro del panorama del almacenamiento por nube. Es fácil subir archivos como películas o crear documentos que recopilen enlaces directos a otros sitios de intercambio de archivos donde se esconde el material pirateado.
Los enlaces que llevan a Google Drive son fáciles de compartir en foros, grupos de Facebook…
Precisamente el auge de los grupos de Facebook donde se comparten enlaces a Google Drive se debe a que los motores de búsqueda no registran todavía el contenido que hay en Drive. Los usuarios necesitan estas comunidades para encontrar material pirata… Y además significa que las compañías lo tienen más difícil para encontrar los enlaces y denunciarlos para que se eliminen.
Ante todo este cúmulo de ventajas y facilidades para los piratas, no es de extrañar que en el último mes se hayan procesado más de 4.700 peticiones de DMCA (Digital Millenium Copyright Act) para cerrar enlaces ilegales de Google Drive. En comparación, solo se han recibido 100 peticiones para cerrar enlaces en MEGA y poco más de una docena de peticiones de cierre para Dropbox.
¿Y qué tiene Google que decir de todo esto? “Google Drive tiene una variedad de medidas contra la piratería”, ha explicado un representante de la compañía a Mashable. “Y seguiremos trabajando para mejorar nuestras protecciones para prevenir la piratería en todos nuestros productos”.
Entre líneas se puede leer que a Google, evidentemente, no le hace ninguna gracia que uno de sus productos haya obtenido esta “función adicional”. Es posible que Drive tenga los días contados como cubil de piratas si Google pasa rápidamente en acción y toma cartas en el asunto.
Fuentes: Mashable, Gadgets 360, Tribune, Geek
